domingo, 12 de febrero de 2012

Nancy

-Creia que eso ya habia terminado-dijo recordando cada milimetro de su vida mientras Dareen le pegaba otra de sus palizas.

Nancy no era como las demás chicas del Keveland Street de echo el lado oeste de la cuidad estaba muchisimo mas descuidado.No lo tenia nada facil para pasar desapercibida con su lacia melena rubia al viento seguida de una cara angelical,preciosos ojos azules junto a sus labios carnosos pintados de rojo y su exsuberante cuerpo,no podia pedir demasiado trabajando en un club de striptease,"Littel Pink Lady´s",concretando demasiado junto al callejón de la avenida 14.Ese callejón...ese callejon la libró de muchas muertes demasiado esperadas.

La primera,si recuerdo bien fué el 15 de agosto hace tres veranos aproximadamente salia de aquel bar honrada de suerte tras haber ganado a Paul,apodado manos de oro,a una partida rapida con bastantes ganancias.Llebandome su Tokarev TT 33(no era una de las mejores pero ya tenia como matar al cabron de Dareen) y su preciado cadillac rojo con asientos tapizados en piel.La mejor técnica era no llamar la atención,en Down Twon si alardeabas de tus ganancias acababas en un descampado y como recuerdo una bala entre ceja y ceja,pero alguien se fijó en mí o en la brillante Tokarev que me asomaba por el bolsillo trasero del pantalón,o simplemente en mi trasero visto desde atrás.
Da igual lo que fuera,lo unico que recuerdo mas hayá de eso es amí la noche siguiente sin mi Tokarev,mi cadillac y sin ropa.Ensangrentada de pies a cabeza y sin saber que coño habia pasado,no habia que ser muy listo...una chica sin ropa,ensangrentada y sin recuerdo alguno...hasta yo sabía que habían echo conmigo.
Era simple,me levanté y al abrir el contenedor en busca de ropa,me dí cuenta de que tenia las costillas fracturadas,moría de dolor pero aún asi seguia buscando.Encontré una camisa desgastada y me fui a casa.

Al llegar,abrí la pueta viendo a Dareen acabarse de meter unas cuantas rayas mas de coca con la botella de vozka acabada sobre la mesa.

-¿Donde coño has estado?

Yo me limité a seguir el pasillo hasta la habitación,temblando de los -3 grados que marcaba el termometro.Dareen me agarró del brazo,se levantó cogiendo la botella de cristal con la otra mano y la lanzó contra la pared.

-Esa camisa es de tio y no puede haber sido mia después de dos putas noches en el bar.¿O me equivoco?-Preguntó con demasiada repugnancia.

-Te equivocas demasiado,Dareen.

Me limité a mirarle fijamente con la respiracion alterada,sabia que eso le haria enloquecer por su puto modo de creer que el tiene que ser mejor que las mujeres.Agarró un trozo de cristal y me hizo un corte en el cuello siguido de la primera paliza más debastadora de mi repugnante vida.Ahora no solo debia tener alguna cosquillas rotas,sino algo mas que cientos de moratones y pequeños trocitos de cristal clavados en la espalda.
Él ya estaba feliz,me habia dado "mi merecido" y mientras yo comenzaba a llorar él se encerraba en la habitacion riendose a carcajadas y repitiendo una y otra vez -Asi sabras quien manda.
Como si mandar supusiera pegarme esas palizas que supuestamente merecia...

Necesitaba una pistola pero no tenia ni dinero para pagar una misera bala con la que suicidarme,seria despues de haber matado a ese cabrón y descubrir quienes fueron los de aquella noche al salir del bar.Agatha me comentó donde trabajaba,en el "Littel Pink Lady´s" un club de striptease donde pagaban mas o menos bien,no era muy decente pero era lo unico que tenia.
A la mañana siguiente me cambie quitandome alguna que otra mancha de sangre y me dirigí hacia el club,me contrataron por supuesto pero me hicieron hacer alguna que otra cosa.

Tras meses metida en el club, averigüé un par de cosas de como se movia toda la pasta y todas las mafias.Ya era 27 de febrero,de noche,la lluvia se apoderaba del cielo y entre la avenida 14 y la 16 tenía mi segunda paliza asegurada pero esta vez con alguna que otra sorpresa.

-¡Eh,tú!-Gritó desde lejos alguien.

No reconocia su voz asique me giré.

-¿Tienes otra Tokarev TT 33 para mí o esta vez vas a portarte mejor y me dejaras hacertelo estando calladita?

Tube miedo e intente escapar corriendo pero me habian rodeado,ya se disponian a despojarme de mis prendas cuando de entre las sombras alguien apareció y se los cargó a todos.No sabia que coño pasaría quizás ese me queria para él solo,pero me agarró del brazo y me levantó.

-Vamos, aquí no estarás segura Nancy.-Dijo cargándome hasta su coche.

Me quedé atónita,como había averiguado mi nombre aquel tipo con traje negro y chupa de cuero.No me importaba,me fié de él,al fin y al cabo me habia salvado pero no sabia si era con final feliz o uno trágico.

-¿Quien eres?

-Tú llámame Gold....Baja.-Dijo con tono autoritario.

Era mi casa,bueno la de alguna familia de vacaciones que se dejó la ventana entreabierta,bajé y subí al piso.Desde aquel momento ya solo me quedaba acabar con Dareen y seguidamente irme de la ciudad,pero no podia hacerlo tan rapido,necesitaba la pistola.

Dias despues concretamente la madrugada del 16 de marzo aporreé la puerta y la abrí tras varias noches sin aparecer sabia que Dareen esperaba una paliza pero esta vez seria él la victima.

-Hola,Dareen-Sonreí atrevidamente.¿Me esperabas?

-¡¿Donde coño estabas puta?!-Contestó levantándose.

Casi no se podía tener en pié,lo que me hacia más fácil el trabajo.Dareen ya se disponía a zurrarme con la botella rota que había sobre el sofá pero le paré le tire al suelo y le clavé su preciada botella en el culo.
Tras varias patadas y algunos cuantos puñetazos cogí del bolsillo trasero una 9mm la acerqué para que ese cabrón notara el frio acero cohesionando con su frente pero se me ocurrió algo mejor la fui bajando hasta llegar al punto que tanto le encantaba de el y que no tenia mas que unos cuantos pocos de centímetros.

-¡NO!¡NO!-Gritaba el gilipollas como si eso hiciera que yo pensara pararme.

Simplemente apreté el gatillo y me fuí,sabia que en el hipotético caso de que ese cabrón viviera seria sin poder vivir como a el le gustaba.

Desde aquel día después de varios años,voy por la calle con la absurda esperanza de encontrarme con Gold.

No hay comentarios:

Publicar un comentario